Es posible que ya ni te acuerdes de la primera vez que te tomaste una Fanta. Seguramente fuera en verano y te quedaste con ganas de tomar otra, nunca antes habías deleitado a tu paladar con una bebida tan refrescante. En Fanta saben aprovechar mejor que nadie todos los recursos que proporciona la naturaleza, por esa razón sus refrescos contienen zumo de frutas de naranjas y limones recién exprimidos. Su departamento de calidad se encarga de buscar las mejores naranjas y limones para que luego esto se note al tomar una Fanta. De hecho, en cada botella de dos litros de Fanta Naranja saborearás nada menos que dos naranjas y media. Mientras que si eliges Fanta Limón serán tres limones y medio.
Pero es que además de esta apuesta por la naturaleza también se cuida el medioambiente. En Fanta se preocupan por la ecología y lo demuestran no sólo con palabras sino también con hechos, pues en sus procesos de elaboración y embotellado incorporan prácticas de mejora medioambiental a lo largo del ciclo de vida de los productos. Por poner un ejemplo, el 15% del vidrio de las botellas de Fanta procede de material reciclado. Por otro lado, también se usan envases PET 100% reciclables, los cuales cada vez son más ligeros y generan menos residuos.
Pero sin duda lo que más nos importa es la naturalidad de su sabor, único e inconfundible. El sabor de Fanta es auténtico, gracias al cuidado por la naturaleza y en saber aprovechar sus recursos. En España ofrecen tres sabores: naranja, limón y fresa+piña (éste último sólo disponible en Canarias), pero en todo el mundo Fanta cuenta con más de setenta sabores diferentes. ¿Te imaginas poder probarlos todos? Hay una Fanta para cada uno, así que descubre cuál es la tuya y háznoslo saber.